Reinventarme ahora que no sangro,
asomarme al balcón del que será,
retregarme la piel con esponjas porosas,
que limpien las células muertas y tu olor.
Abonar el campo del olvido,
casi nunca me descuido, por si acaso:
taponar las grietas del dique que contiene todos y cada una de las voces
que me quedaron por darte.
Y el... cobarde¡¡, escrito con tus actos que me vibra en la garganta
Ni mirarte, ni pensarte, ni acordarme.
Dejar de colgarme de cualquiera,
Dejar de tropezar en las aceras,
Dejar de claudicar en mis batallas.
Ni mirarte, ni pensarte, ni acordarme...
Aprender inglés, ir más a clase.
3 comentarios:
Quitar ya Hound dog de mi blog, porque raya.
Darle a Irene el regalo de cumple que le debo.
Sacar una maqueta y dar conciertos, de una puta vez.
Cerrar menos bares, quemar menos cartas y, sobre todo, robar menos meses de abril.
En cuanto a lo tuyo ... empieza apareciendo por clase, tío. Es un primer paso.
Un abrazo.
Vale, ahora tengo que irme a dormir, pero me prometo seguir leyendo.
Yo también debería ir a clase.
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